La traducción de patentes

La traducción de patentes

La traducción de patentes se caracteriza por su exactitud y literalidad. En general, se trata de textos híbridos, que combinan aspectos técnicos y jurídicos. Con motivo del Día Mundial de la Propiedad Intelectual, el 26 de abril, repasamos las claves de la traducción de patentes.

El registro de patentes en el contexto de la propiedad intelectual tiene como objetivo proteger las invenciones de empresas y particulares y, en definitiva, reconocer su autoría. En la actualidad, existen multitud de organismos nacionales e internacionales para el registro de patentes, como la Oficina Mundial de la Propiedad Industrial (OMPI) y la Oficina Europea de Patentes (OEP).

La exportación de productos a otros mercados exige la traducción de la patente original para que quede registrada a nivel internacional y contar así con todas las garantías legales en el extranjero.

TRADUCCIÓN DE PATENTES A NIVEL INTERNACIONAL

En el proceso de traducción y registro de dichas patentes a nivel internacional es fundamental mantener la literalidad tanto como sea posible para facilitar los procesos administrativos. Para ser rigurosos, es importante mantener una coherencia terminológica y variar lo menos posible las estructuras.

EL AUGE DEL REGISTRO DE PATENTES

En los últimos años, el auge del registro de patentes internacionales ha generado un aumento de las traducciones de este tipo de documentos a otros idiomas. Según datos de la Oficina Española de Patentes y Marcas, en España se registran más de 1800 solicitudes de patentes al año, mientras que a nivel europeo se alcanzan unas 175 000 al año.

La traducción en el ámbito de la propiedad intelectual requiere un alto nivel de especialización en cuanto a terminología, sintaxis y puntuación. Además, es importante hacer un uso muy riguroso del lenguaje. Por otra parte, el traductor debe tener conocimientos sobre el marco jurídico, las leyes de propiedad intelectual y los principios técnicos de la patente.

ERRORES EN LA TRADUCCIÓN DE PATENTES

La importante inversión que se realiza al crear una patente puede echarse a perder por una traducción errónea de la misma. Y es que un pequeño error puede alterar el documento y provocar grandes pérdidas para las compañías. Además, hay que tener muy en cuenta los plazos. El proceso de registrar una patente puede llevar un año o incluso más. Sin embargo, este tiempo y el coste asociado se pueden multiplicar si la traducción contiene errores que provoquen el rechazo de la solicitud.

Por lo tanto, la mejor opción es contar con una agencia de traducción especializada en el campo de la propiedad intelectual. En Najual Traductores & Intérpretes somos especialistas en la traducción de patentes desde hace 21 años. Trabajamos con traductores expertos en el campo tecnológico de cada invención, con conocimientos legales y una amplia experiencia en la traducción de patentes. Llámanos o escríbenos sin compromiso y nos encargaremos de gestionar tus traducciones en los plazos de entrega estipulados y con tarifas altamente competitivas. Najual Traductores & Intérpretes es, sin duda, tu mejor opción para la traducción de patentes.