La traducción jurada en tiempos de pandemia

La traducción jurada en tiempos de pandemia

La demanda de las traducciones juradas -también denominadas públicas, oficiales o certificadas- ha aumentado en el último año. Son empleadas en trámites internacionales que requieren la traducción de una documentación con efecto legal ante un organismo o institución oficial.

Las traducciones juradas son cada vez más necesarias en un mundo que está totalmente globalizado y en el que se intercambia constantemente información de cualquier tipo. El movimiento de personas entre un país y otro –ya sea por motivos laborales o por estudios– así como la actividad internacional de las empresas –para realizar acuerdos comerciales y ejecutar obras– hace necesaria la realización de múltiples trámites administrativos que, en un gran número de ocasiones, requiere traducciones juradas.

CONSECUENCIA DE LAS RESTRICCIONES DE MOVIMIENTO

Desde el inicio de la pandemia nuestra forma de vida ha cambiado de manera sustancial. Entre otras cosas, las acciones internacionales se han visto directamente afectadas debido a las fuertes limitaciones a los movimientos de las personas. En este contexto, las traducciones juradas han adquirido un papel protagonista, ya que se utilizan para resolver diversas situaciones de forma rápida. Así, por ejemplo, los trámites para ciudadanos que en este último año se han visto obligados a volver a su país de origen han podido agilizarse gracias, en parte, a las traducciones juradas.

TRÁMITES SUSCEPTIBLES DE TRADUCCIÓN JURADA

La variedad de documentación que se traduce de manera oficial es muy amplia: licencias de conducir, diplomas académicos, documentos de identidad y pasaportes, permisos de residencia, contratos comerciales, escrituras públicas y privadas, poderes, estatutos, testamentos, solicitudes de adopción o licitaciones públicas, entre otros.

EL PERFIL DEL TRADUCTOR JURADO

El requisito fundamental de una traducción jurada es que debe estar firmada y sellada por el traductor jurado que la hizo, que es quien tiene la potestad legal de otorgar valor legal a los documentos que traduce. En otras palabras, su sello certifica que la información de dicho documento es veraz y la convierte en oficial. Aunque los requisitos que debe cumplir un traductor jurado varían de país a país, la formación de este profesional de la traducción debe estar avalada por una instancia oficial. En España, los traductores jurados deben realizar un examen organizado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. Una vez aprobado, el candidato entra en una lista oficial de traductores jurados a nivel nacional.

En Najual Traductores & Intérpretes llevamos 19 años ofreciendo el servicio de traducción jurada, siempre cumpliendo con los más altos estándares de calidad profesional.